Wednesday, November 25, 2009


A 39 años de la histórica huelga de la DGAC; 4 muertos y dos aviones accidentados. Parte II.

El 17 de junio de 1970, a los 5 días del inicio del movimiento que tenía a todos los aeropuertos y aeródromo cerrados, el número de funcionarios detenidos llegaba a 13.

La Fiscalía de Aviación seguía aplicando la Ley De Seguridad del Estado y los 12 funcionarios fueron a parar a la Cárcel Pública y la única mujer, Manuela Muñoz al, Hospital de la Fuerza Aérea de Chile por encontrarse enferma,

Ese mismo día la Aeronáutica chilena quedó bajo la tuición de la FACH y el Ministro de Defensa Nacional Sergio Ossa Pretot, de quien dependía directamente la Dirección General de Aeronáutica Civil, manifestó que la huelga era “inaceptable”, por parte de un personal que por disposiciones legales está sometido a los reglamentos de disciplina que rigen a las Fuerzas Armadas. Agregó: “He ordenado aplicar el Código de Justicia Militar por incumplimiento de deberes militares”.

Mientras tanto los vuelos de LAN y LADECO se mantenían suspendidos.

La prensa señalaba que el periodista José Kramarenko Dower declaró que “alrededor de 200 magallánicos son afectados por la huelga”. A decir verdad en aquella época no había por donde llegar ni salir de Punta Arenas, ya que la vía terrestre estaba bloqueada por nieve.

Accidentes

El día sábado 20 de junio de 1970, Daniel Arizpe Arambarri, ex piloto de LAN y piloto civil, despega en el cessna Skymaster CC-CDL, de propiedad de la Compañía Pesquera Iquique, un poco antes de las 10:00 AM desde esa pista rumbo a Los Cerrillos, para viajar con algunos familiares y amigos con destino a Arica. Las condiciones meteorológicas en el aeródromo de salida estaban para vuelo visual, pero en Los Cerrillos eran condiciones marginales y debía efectuar una aproximación instrumental a la pista 03 de Los Cerrillos en medio de una densa niebla que existía en el área y que reducía la visibilidad, pero dentro de los márgenes para aproximar.

A las 10:10 AM hora local, el Skymaster, se estrella en un potrero del fundo Chena de San Bernardo, después de chocar con un frondoso árbol de 15 metros de altura, desgarrándose parte del fuselaje. El avión con velocidad de aproximación y sin control se estrelló en el potrero, arrastrándose más de 30 metros por el terreno disparejo y mojado, lo que impidió se incendiara. Cuatro de los ocupantes de la nave fallecen en el lugar debido al violento impacto. Entre ellos el piloto, Daniel Arizpe de 35 años, su esposa. Albina Alicia Larena de 30 años; Betty Komblut Kiberstein de 37 años y León Berzini Monhail de 36. El único sobreviviente de los ocupantes fue Jorge Komblut, de 24 años que fue atendido en la Posta Central de la Asistencia Pública. La aeronave quedó totalmente destruida.

Testigos como Enrique Ortega y un amigo, que estaban cerca pintando una casa, se guiaron por los despojos del avión para llegar a él a los pocos minutos entre la niebla. “Había un señor parado que pedía trajéramos un médico”. Lo acostamos en el pasto mientras Ortega iba a avisar a los patrones. La camioneta de una radioemisora llegó al rato y en ella subieron al herido para llevarlo a la posta”. Se trataba de Jorge Komblut, único sobreviviente.

Luego, dicen que una hora y algo más, un avión de LADECO, DC-6B, Vuelo 80 proveniente del sur de país, con 43 pasajeros y 6 tripulantes, piloteado por Gerardo Piegleguy, sufre un percance al rozar con un ala un árbol de varios metros de altura al estar aproximando hacia la pista 03 de Los Cerrillos. Sólo la pericia del piloto, que descendía por instrumentos y mala visibilidad, pudo llevar a la aeronave hasta la pista.

La empresa LADECO entre­gó más tarde la siguiente de­claración: "LADECO informa que su vuelo 80, durante la aproxima­ción para aterrizar en Santia­go, rozó con el ala derecha las ramas de un árbol sufrien­do daños menores en el borde de ataque de la punta del ala. Las causas están siendo in­vestigadas por las autoridades pertinentes.”

En ambos casos, el Coman­dante de Aviación y Fiscal Enrique Montero, será el encargado de establecer los motivos que oca­sionaron estos hechos.

En 25 años de aproximaciones instrumentales a esa pista –hasta el momento de los accidentes- jamás uno o dos aviones rozaron ramas de árboles en su trayectoria final a la pista, lo que hace suponer a algunos expertos, que hubo una falla altimétrica seria en la información entregada a los pilotos y que hizo volar a los aviones más bajo de lo que correspondía.

No se hizo público el resultado final de la Investigación del Fiscal Montero.

(Continúa III parte y final).