Wednesday, May 07, 2014





El poder sin restricción



Muchos se han preguntado en que está basado el poder que la Iglesia Católica tiene sobre la gente y, además, cómo logra ocultar las situaciones financieras en que se ve involucrada.

La expresión religión proviene del latín "religare" y quiere decir "unir" o "atar" al hombre, como criatura creada; con Dios, como ser creador y supremo. La Iglesia Católica es una suerte de representación de aquello.
Y uno de los principios más esgrimidos y repetidos por la religión católica es el de llevar una vida simple, alejada de lujos y pretensiones de poseer bienes materiales. Por otra parte, el principio de caridad también constituye una de las bases de la religión católica; recibir las ofrendas y entregar fe.
Durante el período de la Edad Media, como en otros lapsos similares de tiempo -y eso no excluye al de hoy- la religión católica ha sabido llegar a los creyentes. Desde allí, ha existido una suerte de manipulación con las grandes masas de fieles que desean creer en algo que los proteja, que les deje la mente tranquila y los cuide de los eventos de la vida que suceden alrededor de cada uno.
Pero, detrás de eso, la historia indica que la iglesia católica se encuentra repleta de casos de violencia, sexo, pedofilia y actos financieros de igual repudio –acusan- que incluirían hasta el asesinato, lo que le pudo suceder al Papa Juan Pablo I.
En cuanto al mundo de las finanzas, en los años setenta, los nombres como el del cardenal Albino Luciani, el cardenal Marcinkus, el contador Roberto Calvi y Michele Sindona, se entrelazan en finanzas internas y el  Banco Vaticano, lo que dejó una profunda huella de desconcierto y de grandes sumas de dinero perdidas del Vaticano.
Años más tarde, se dice: “El escándalo del banco Ambrosiano saltó al descubrirse el agujero fiscal de 1.400 millones de dólares en 1981, uno de los mayores escándalos financieros de la post-guerra. El Vaticano era el principal socio del banco Ambrosiano” (Antonio León / Tumaini).
Debido a esta escandalosa situación, muchos acreedores exigieron al Vaticano les devolvieran los dineros perdidos; una cantidad cercana a los 406 millones de dólares, que la iglesia no pudo negar ya que estaba implicada en un escándalo político y financiero importante de aquellos años. El principal responsable, cardenal Paul Marcinkus, llamado el banquero de Dios, fue retirado de la directiva de la banca Vaticana y enviado a una parroquia de Illinois, Estados Unidos, donde a los 84 años falleció en febrero de 2006.
El Instituto para las Obras Religiosas (IOR), conocido popularmente como el Banco del Vaticano, está siendo investigado por la justicia italiana por presunto lavado de dinero ilícito, junto a diez bancos italianos, según el diario “La Republica”, que es el más importante diario italiano de información general que se imprime y edita en Roma con una amplia difusión en toda Italia.(1-5-2010)

Se puede observar como se ha introducido la religión católica en las estructuras político-económicas que controlan el mundo y hacen con él lo que quieran. Pero... ¿Qué vende la iglesia católica para ser tan rica en dinero?... Simplemente fe.  Ella la vende y los católicos la compran para estar tranquilos.